Quinto partido de la segunda vuelta que disputamos en la
planta sótano de San Pablo, ante el favorito al ascenso, Devils Rockets. Ya
solo nos quedan tres partidos para finalizar la liga.
Este partido es de los que tienes marcado en rojo cuando
comienza la temporada, porque el rival es un equipazo y porque ya te vas
conociendo y se empieza a crear una bonita rivalidad, que se traduce en muy
buenos encuentros. Y este lo fue.
El contrario acudió únicamente con seis jugadores, lo cual
te condiciona ineludiblemente, porque aunque su cinco inicial era temible, muy
alto y de mucha calidad, la escasez de banquillo te impide mantener un gran
nivel durante todo el encuentro. De eso sabemos bastante, porque hemos
disputado muchísimos partidos con 5-6 jugadores en temporadas pasadas.
Este año está siendo diferente, porque hemos conseguido una
plantilla larga. A pesar de tener dos lesionados de mucha importancia, nos
plantamos 9 jugadores en la cancha.
Nosotros salimos con nuestro plan de siempre, intentar
defender fuerte, atacar con paciencia, y más o menos cumplimos con el plan
durante casi todo el partido. Sufrimos muchísimo con el rebote defensivo, ya
que el rival va muy bien al ofensivo y siempre supo sacar segundas y hasta
terceras opciones. Lo que ocurrió es que no estuvo muy regular de cara al aro
desde ninguna distancia, y falló muchos tiros libres. Eso nos permitió ir
cogiendo una cómoda ventaja porque nunca tuvimos un bajón ofensivo, siempre
fuimos sumando. Únicamente perdimos el último parcial (creo que 13-16), el
resto de cuartos fueron para nosotros.
En resumen, fuimos más regulares ofensivamente que el rival,
ya que las defensas de ambos fueron muy parejas. Eso nos permitió controlar el
partido.
Lo mejor: Hicimos un partido muy completo, en ataque y
defensa ante un rival muy difícil.
Lo peor: Tuvimos momentos en los cuales sufrimos mucho en el
rebote defensivo, no éramos capaces de cerrar al rival.
Ahora paroncito de feria, y volveremos a las canchas el
Domingo 18 a las 12:30 contra CB Bistiboys.
