lunes, 28 de abril de 2014

LUCA FUCKERS 49 CD TRAN TRAN TEAM 50


Cuarta jornada de la segunda vuelta, que disputamos en inusual horario, un viernes a las 20:00 de la tarde en el pabellón de Hytasa. Esto quiere decir que nos quedan cuatro partidos para terminar la temporada, oohh.

En primer lugar, ya somos Club deportivo, tras la resolución de la Consejería de Educación, Cultura y Deporte de fecha 31 de Marzo de 2014.

En segundo lugar, nos marcamos un partidazo este viernes pasado, ante un duro rival como Luca Fuckers que nos planteó un partido dificilísimo.

Y todo parecía ponerse en contra desde el principio, ya que nada más comenzar el encuentro, Carlos sufrió un esguince que le apartó definitivamente del partido, y posiblemente de la temporada (estas cosas hay que curarlas bien). Baja importantísima, que se une a la de Javi, por rotura de nariz.

El rival tenía superioridad numérica y desde el minuto uno estableció una defensa muy agresiva con la intención de provocar muchas pérdidas y salir al contraataque y durante varias fases del partido lo consiguió. De hecho, nos hicieron mucho daño con ese contraataque y con los tiros de tres. Tras una serie de confusiones a la hora de interpretar su defensa y aplicar correcciones a nuestro balance defensivo, conseguimos controlar el encuentro y nos fuimos siete arriba al descanso.

Pero cuando más controlado parecía que teníamos el encuentro, fue cuando se nos fundieron los plomos y no supimos jugar con esa ventaja. En la segunda parte, y sobre todo en el último cuarto, los 8-9 puntos de ventaja que teníamos se esfumaron en un plis plas, tras un cúmulo de precipitaciones, mala defensa, confrontaciones, etc., que hicieron que el rival se pusiera 3 arriba y comenzara inteligentemente a contemporizar con el reloj y controlar el partido. El contrario apretó de lo lindo durante todo el encuentro, y mostró un gran nivel tanto en defensa como en ataque.

Pero el equipo le echó casta al encuentro, no se puso nervioso, recuperamos sensaciones, confiamos en nosotros mismos, y le dimos la vuelta al partido poniéndonos cuatro arriba a falta de pocos segundos.

La anécdota graciosa del encuentro estuvo en que los jugadores de cancha de Luca, tras anotar un triple espectacular en el último segundo, pensaban que iban solo tres abajo y que habían forzado la prórroga, y se pusieron a celebrarlo efusivamente en la cancha ante la cara de perplejidad de nosotros, el equipo arbitral y sus propios compañeros de banquillo.

Lo mejor: En general, que jugamos un partido difícil, bronco, con altibajos, y dimos la cara absolutamente, todos aportaron su granito de arena y remamos todos a una.

Lo peor: Que nos ponemos demasiado nerviosos y nos falta saber contemporizar mejor cuando llevamos ventajas, pero bueno, somos humanos ¿no?